«Mi padre fue campeón mundial de Fórmula 1. Así que, crecer en ese ambiente y, sobre todo, intentar seguir el mismo camino y dedicarme también a las carreras, fue muy exigente al principio», admite Nico, quien también se hizo con el título en 2016. Sin embargo, en lugar de relajarse tras su retirada del automovilismo, Nico tiene la vista puesta en las próximas décadas, ya sea en el futuro del patrimonio o en el de la sostenibilidad.
Desde que ganó el Campeonato del Mundo de F1 en 2016 con Mercedes, la vida de Nico, de 38 años de edad, ha dado muchas vueltas. Ahora es un destacado empresario e inversionista en sostenibilidad, que se ha aventurado en el apasionante campo de la electromovilidad a través de sus inversiones en la Fórmula E y varias prometedoras empresas emergentes. También creó el Festival GreenTech, que presenta innovaciones de vanguardia, y lanzó Rosberg X Racing para la serie todoterreno Extreme E.
El legado automovilístico de los Rosberg
A pesar de su gran interés por el futuro, Nico aprecia su pasado, especialmente su entorno familiar, que le proporcionó un comienzo único en su carrera como piloto. «Mucha gente me observaba desde el principio, cuando tenía diez años, y me juzgaba, y decía: “¿Es tan bueno como su padre?”». Al respecto, añade: «Había mucha presión sobre mí, muchas expectativas por parte de todo el mundo. Al mismo tiempo, fue una ventaja: me dio algunas oportunidades que otros no habrían tenido, pero también supuso mucha presión.
Creo que, al final, me hizo más resiliente y me ayudó mucho a convertirme en campeón mundial, lo que es bastante increíble».
Heredar las expectativas familiares
Para quienes se encuentren en una encrucijada similar —proceder de un legado familiar de éxito y enfrentarse a la disyuntiva de seguir el mismo camino o labrarse el propio—, las palabras de Nico pueden aportar claridad. «Si eres hijo de una gran dinastía familiar o de una gran familia de empresarios y estás mirando hacia el futuro, me gustaría recomendarte que escuches tus sentimientos y lo que te dice tu corazón sobre qué dirección tomar en la vida.
He visto tantos ejemplos de hijos que han seguido el camino de las expectativas de la familia de unirse a la empresa familiar, pero que quizá no terminan siendo felices en esa dirección. Nunca insistiré lo suficiente en lo importante que es elegir un camino que te haga feliz».
Para Nico, la importancia de contar con un buen equipo no solo fue relevante a lo largo de su carrera en la Fórmula 1, sino también en sus proyectos empresariales: «Si sigues el negocio familiar, debes estar abierto a recibir consejos de la gente que tiene experiencia y que ya ha estado en ese ámbito».
Ayudar a la próxima generación a desarrollarse
Criado en Mónaco por su padre finlandés y su madre alemana, Nico no es ajeno a la idea de la movilidad global. El beneficio de esta perspectiva internacional es doble: Nico puede ver la importancia de la movilidad sostenible con sus retos únicos y también puede apreciar la complejidad de gestionar el patrimonio y un objetivo común en una familia global y multigeneracional.
«Mis hijas tienen seis y ocho años», dice Nico. Para él, ser un modelo para la nueva generación implica dar buen ejemplo y desarrollar un propósito familiar compartido. Este esfuerzo por crear valor más allá de lo financiero a largo plazo se basa en acciones y no solo en palabras. Además, el interés por el bienestar de los demás es un motivo que ha acompañado a los Rosberg durante décadas. La madre de Nico, Sina, siempre hizo hincapié en la amabilidad, y estos valores personales son compartidos ahora por Nico y sus hijas.
Combinando el sentido del propósito y el espíritu emprendedor en sus hijas, explica una conversación reciente que tuvo con ellas. «Dije: “Hagamos unas pulseras y salgamos a venderlas. Y luego, con lo recaudado, pueden usar la mitad para ir la juguetería a comprar lo que quieran, pero la otra mitad la vamos a donar a la caridad”. Quiero inculcarles la importancia de contribuir. Una necesidad humana básica es contribuir.
Así que para nuestra próxima generación, para nuestros hijos, si contribuyen en sus vidas, eso los hará más felices en sus propias vidas. Y por eso también estoy muy, muy centrado en intentar apoyar a mis hijas en ese camino».
¿Cuál es la filosofía de gestión patrimonial de Nico?
Proteger la calidad de vida de sus hijas es algo más que inculcarles sentido del propósito y la filantropía. También requiere conocimientos fiscales y Nico ve una dirección muy clara a largo plazo para su propia cartera. Hay paralelos entre su mentalidad financiera y su motivación durante su pasada carrera automovilística, como él mismo dice: «La innovación es la clave de la creación de valor».
Al respecto, añade: «Vemos este exceso de creación de valor en la tecnología en las últimas décadas. Ahí es donde radicaba mi fortaleza en las carreras. Siempre trataba de innovar, de mejorar mi auto, de dar el siguiente paso. Y ahora he trasladado esa pasión a los negocios, donde realmente disfruto siguiendo la mayor innovación que se está produciendo allí.
Especialmente en el mundo de las empresas emergentes: cuando se trata de mi patrimonio, diseñamos una estrategia muy, muy clara, que pusimos en marcha. Sabemos exactamente qué rendimientos estamos buscando. Sabemos cómo vamos a asignar este patrimonio. Hemos apostado por la renta variable pública porque, a largo plazo, es una clase de activo que va a ofrecer una rentabilidad del 8-9%, que es una rentabilidad realmente positiva y un gran perfil de riesgo/rentabilidad».
También comprende la importancia de un horizonte de inversión claro con planes a largo plazo: «Por supuesto, es volátil a corto plazo. Pero si tienes un horizonte de cinco a diez años —que todos los jóvenes, incluso la gente de mediana edad, deberíamos tener—, entonces vale la pena».
Al respecto, añade: «Y luego está la clase de activo de capital riesgo, que forma parte del mercado privado, donde se puede intentar superar el rendimiento de la renta variable pública, si se hace bien y si se logra el acceso y la diversificación adecuados».
Y, en armonía con las lecciones que enseña a sus hijas sobre el patrimonio, Nico aplica los mismos criterios a sus inversiones: «Hemos creado Rosberg Philanthropies, donde empleamos parte del patrimonio que estamos generando para hacer el bien, para tener impacto».
Rendimientos sostenibles en un mundo más limpio
Por último, no es de extrañar que Nico —con un gran ojo para la electromovilidad y la innovación— crea en la inversión sostenible. En línea con las opiniones de los expertos del equipo Next Generation de Julius Baer, Nico está de acuerdo en que no tiene por qué haber concesiones en materia de rentabilidad. «La inversión sostenible es un gran tema», subraya. «Creo que es muy valioso si podemos combinar esos rendimientos con el impacto y con invertir de la manera correcta, y vemos que las oportunidades crecen allí cada vez más».
«En mi cartera, por ejemplo, no invertimos en petroleras, aunque la clase de activo de energía ha sido la que mejor ha rendido en los últimos dos años en algunos momentos. Tampoco invertimos en empresas de cigarrillos; hemos excluido ese tipo de cosas».
¿Qué futuro le espera a Nico y a su empresa? «En el mundo de las empresas emergentes, las inversiones más emocionantes son las que tienen más impacto, porque es estupendo participar en ellas. Y no hay concesiones en términos de rentabilidad», concluye.